GraphQL

Arquitectura de software orientada a APIs en TI La arquitectura de software orientada a APIs coloca las interfaces como el eje principal de integración. Las APIs permiten que módulos, equipos y socios trabajen de forma independiente sin perder cohesión. En un entorno cambiante, una buena arquitectura API facilita la evolución, la escalabilidad y la seguridad de toda la solución. Principios clave Las APIs deben ser productos: cada contrato tiene un objetivo claro, un público y un road map de mejoras. Contrato estable y versionado: OpenAPI o similar para describir recursos, acciones y errores, con versiones que minimicen impactos. Desacoplado de responsabilidades: frontend, negocio y datos se comunican a través de interfaces bien definidas. Seguridad y gobernanza ligera: políticas claras, autenticación robusta y límites de uso para evitar abusos. Observabilidad por diseño: métricas, trazas y logs útiles para detectar problemas y planificar mejoras. Diseño y ciclo de vida de las APIs ...

GraphQL, REST y gestión de APIs en TI En TI, las APIs son la columna vertebral de las aplicaciones modernas. Permiten conectar sistemas, compartir datos y automatizar procesos. Entre las opciones más usadas están GraphQL y REST. Cada enfoque aporta ventajas y también límites; entenderlos ayuda a diseñar mejores soluciones. GraphQL ofrece un esquema único y consultas flexibles. Con GraphQL, el cliente describe exactamente los datos que necesita y el servidor devuelve solo esa información. Esto evita el over-fetching y facilita que el frontend evolucione sin que a cada cambio le correspondan cambios en la API. Sin embargo, la implementación puede ser más compleja: hay que gestionar un esquema, resolvers y posibles problemas de rendimiento por consultas muy grandes. También requiere buenas prácticas de caché y una gestión cuidadosa de la versión. ...